Según datos oficiales del Instituto Nacional de Estadística (INE), en 2020 en España había cerca de un millón cuatrocientas mil personas dependientes en todo el país, lo que supone un número importante de personas que pueden necesitar ayuda para abrir una puerta. No todos tienen problemas para utilizar una llave, pero sí que son más vulnerables o tienen más posibilidades de sufrir un percance, como olvidarse las llaves, sufrir un accidente doméstico, etc. Si es algo leve, podemos asumir el tiempo de espera para la apertura, pero supone un riesgo muy alto a la hora de tener que acceder en caso de emergencia. Nuestra recomendación de productos NUKI para estos casos es instalar un sistema Smart Lock para el acceso a la vivienda, con NUKI Fobs para la persona dependiente que vive en el hogar y para los cuidadores y familiares. Esto nos dará la ventaja de poder acceder rápidamente en caso de emergencia, de permitir que puedan abrir sin esfuerzo y sin problema y de poder realizar una apertura controlada o de urgencia en caso de necesitarlo.
Pero pongámonos en situación con un ejemplo real: tenemos un familiar que sufre un percance, pero consigue llamarnos desde su teléfono móvil. Pues gracias a NUKI podemos estar en cualquier lugar y aun así le ayudaremos, ya que tendremos la posibilidad de llamar al servicio de urgencias y darles la opción de abrir en cuanto lleguen (repetimos, esto ya ha pasado a un cliente). Sobran las palabras, pasamos de estar continuamente pendientes y cercanos al domicilio del familiar a estar algo más relajados, ya que avisando al servicio de emergencias se puede controlar la situación desde cualquier lugar.